Freddie Freeman pegó el primer grand slam que pone fin a un juego en la historia de la Serie Mundial con dos outs en la décima entrada para darle a los Dodgers de Los Ángeles una victoria de 6-3 sobre los Yankees de Nueva York en un dramático comienzo el viernes por la noche.
Afectado por un esguince de tobillo grave, Freeman conectó un jonrón con el primer lanzamiento que vio (una bola rápida interior de Néstor Cortés) y levantó su bate en alto antes de comenzar a trotar mientras la multitud de 52,394 espectadores rugía.
Fue una reminiscencia del jonrón de Kirk Gibson que puso fin al juego y que le permitió a Los Ángeles vencer a los Atléticos de Oakland en el Juego 1 de la Serie Mundial de 1988 en el Dodger Stadium, uno de los swings más famosos en la historia del béisbol.
Gibson, marginado por lesiones en las piernas, salió de la banca y conectó con el cerrador miembro del Salón de la Fama Dennis Eckersley.
Freeman, quien se perdió tres juegos durante los playoffs de la Liga Nacional debido a una lesión en su tobillo derecho, no tuvo un hit extrabase en esta postemporada hasta que lanzó un triple el viernes.
En esta Serie Mundial tan publicitada y repleta de estrellas entre dos de las franquicias más históricas y exitosas del béisbol, el Juego 1 ciertamente cumplió.
Fue el tercer partido consecutivo de apertura de la Serie que se fue a entradas extras.
En la parte alta de la décima entrada, Anthony Volpe bateó para una elección del fildeador al campocorto, anotando Jazz Chisholm Jr. desde tercera después de robar dos bases, para darle a los Yankees una ventaja de 3-2.
El veloz Chisholm conectó sencillo ante Blake Treinen y luego robó segunda y tercera para un equipo de los Yankees que no es conocido por su velocidad.
FUENTE LISTIN DIARIO